Este es el inicio de la Semana Santa. Representa la llegada de Jesús a Jerusalén sobre un burro. Al llegar a Tierra Santa, los fieles lo recibieron con ramas de olivo y palmas, como símbolo de una fe renovada. Lo que se hace es ir a misa y bendecir un ramo. Luego, se juntan estas palmas y son quemadas el Miércoles de Ceniza. Tanto la gente que iba delante de él como la que iba detrás gritaba: —¡Hosanna al Hijo de David! —¡Bendito el que viene en el nombre del Señor! —¡Hosanna en las alturas! Cuando Jesús entró en Jerusalén, toda la ciudad se conmovió. —¿Quién es este? —preguntaban. —Este es el profeta Jesús, de Nazaret de Galilea —contestaba la gente. (Mateo 21:9-11